11ª JORNADA. Moralo, 2 ; Plasencia, 3 .

Moralo: César Carrasco, Dani, Asiel, Jonathan, Toribio, Oliver, Pino, Rubén Loarte (Romi, 58'), Adri, Rulo (Gallardo, 58') y Tortu (Durán, 62').

Plasencia: David Mena, Baena, Albarrán, Manu, Berto, Javi Bravo, Pedro Gilarte, Deco (Mariano, 54'), Javi, Cuqui (Ángel Fulla, 80') y Luismi (Juanan, 92').

Árbitro: Aparicio Álvarez, de la delegación de Don Benito. Oscureció su buena labor equivocándose gravemente en la rigurosa expulsión a Asiel (56') por tarjeta roja directa. Además mostró cartulina amarilla al local Tortu y a los visitantes Manu y Pedro Gilarte.

Goles: 0-1 Cuqui (18'). 0-2 Javi (21'). 0-3 Luismi (25'). 1-3 Asiel (32'). 2-3 Romi (70').

Incidencias: Más de 300 espectadores en las gradas del Municipal de Navalmoral con notable y animosa presencia placentina en tarde-noche agradable. La segunda mitad se jugó con luz artificial. El entrenador local, Luis Quintas, cumplió el primero de los dos partidos de sanción con los que fue castigado la pasada jornada siguiendo el juego desde la grada, justo encima del banquillo que no pudo ocupar.

Comentario: El cuadro de Luis Quintas cosechó su primera derrota casera de la temporada y está obligado, mucho más que en anteriores jornadas, a romper su paupérrima racha de resultados fuera de casa el próximo encuentro. Y es que está a un solo punto de la zona de descenso directo ocupando la cuarta plaza por la cola. En su fortín, en el Municipal, sólo ha podido sacar un punto de seis posibles en las dos jornadas consecutivas que le ha tocado jugar y su situación en estos momentos es preocupante. El partido de la próxima jornada ha tomado un cariz dramático teniendo en cuenta que se mide a un Valdelacalzada con el que empata puntos, sin olvidar que además habrá enfrentamientos directos en la zona baja de la tabla. La victoria no sólo resultaría un alivio sino que serviría para recuperar algo el terreno perdido.

El partido frente a la UP Plasencia quedó marcado en los primeros veinticinco minutos, momento en el que el conjunto visitante marcó el 0-3 y pareció guardarse los tres puntos. Después el Moralo CP le echó casta y redujo distancias con una fe impecable aunque se quedó sin fuerzas y sin suerte para cumplir la hazaña. La rondó, incluso con un jugador menos sobre el campo, pero no remató la presión a la que sometió al rival ni tampoco dio su fruto el riesgo que asumió durante toda la segunda mitad. La escuadra del Jerte aprovechó mejor su momento, el que en cierta manera le brindó la del Arañuelo, y se llevó un encuentro ciertamente interesante y emocionante con el paso de los minutos.

Rubén Loarte fue el primero en poner a prueba a los porteros. David Mena, en dos tiempos, atajó un disparo desde la frontal del jugador local. Después llegó la debacle morala en siete minutos, instante en el que los placentinos sacudieron con fuerza para ensanchar distancias en el marcador. Una falta sobre el delantero placentino Luismi en el centro del campo sirvió para que él mismo sacara con rapidez a la posición del desmarcado Cuqui que, sin pensárselo y de un voleón dentro del área, mandó el cuero a la escuadra para el 0-1. Golazo en el primer disparo de la UPP entre los tres palos.

Al rato, sin asimilar el golpe, la zaga verde no fue capaz de despejar una contra y el pequeño Javi, más astuto que nadie, se hizo con la pelota para encarar a César Carrasco, regatearle y subir el 0-2 al marcador. Verlo para creerlo. En dos llegadas consecutivas los dirigidos por Tomás Ruiz habían encarrilado el envite. Pero no acabaron ahí los errores moralos ya que otra vez al siguiente acercamiento placentino el balón acabó en las redes. De nuevo por banda derecha, Javi rompió el fuera de juego con claridad, se plantó delante del guardameta y le regaló el 0-3 a Luismi que le acompañaba en la jugada. Era el minuto 25 y el choque se acabó.

Pero del mazazo en toda regla los de Navalmoral se recuperaron, algo, pronto. Con un sensacional cabezazo cruzado de Asiel a la salida de un córner botado por Oliver colocaron el 1-3 en el marcador. Pero es que pocos minutos después pudieron recuperarse del todo si Tortu, con toda la portería vacía para él, no hubiese rematado alto en boca de gol tras una magnífica jugada personal de Rubén Loarte por la izquierda.

Aún así al descanso se llegó después de una clara ocasión para la UPP que Toribio desbarató salvando bajo palos, con César Carrasco batido, un disparo de Luismi desde cerca.

En la reanudación el Moralo tomó el mando con riesgos en defensa en busca de la proeza. Tortu, a la salida de un córner, obligó al cancerbero David Mena a despejar otra vez a córner con una oportuna mano en la cruceta. El público local se entregó a su equipo y quiso llevarlo en volandas pero se encontró con una desacertada decisión del colegiado al expulsar a Asiel cuando forcejeó limpiamente con Luismi cuando éste se dirigía al área. La rigurosa y exagerada cartulina roja no mermó al equipo de Navalmoral sino que lo enrabietó más. Y eso que en los siguientes minutos César Carrasco despejó con ciertos apuros precisamente el saque de esa falta en la media luna y Cuqui cabeceó un pase desde la derecha que tocó ligeramente un palo.

Al rato, Romi, recogiendo un servicio de Oliver desde la frontal, echó pimienta al encuentro con un disparo duro por bajo que se convirtió en el 2-3. Restaban muchos minutos y el Moralo vio factible la remontada a pesar del despliegue físico que incluso le hacía vulnerable. El Plasencia se atrincheró bien atrás y aunque sufrió algunos apuros por las bandas de Adri y Romi, no se dejó sorprender para lograr su primer triunfo foráneo. Sólo un disparo de Adri que se perdió fuera por poco, en el descuento, fue la acción más clara para devolver las tablas al marcador. Y es que desde el segundo gol moralo, no hubo noticias de los visitantes en ataque.

Toca sufrir y les toca hacerlo a todos desde la humildad y la paciencia. Sigue habiendo mucho margen de mejora y en él se agarran todos los moralos para salir del laberinto en el que se han metido, principalmente por los puntos que se han quedado sin sumar mereciéndolos. Aún así, echar la vista hacia atrás no soluciona nada cuando el remedio está delante, en el futuro.

Rodri hace un paréntesis para recuperarse de su lesión

Por decisión personal, el polivalente zaguero Rodri, se va de la plantilla verde tras no encontrar el final del túnel en su larga lesión. Después de meditarlo desde hace días, se lo ha comunicado al club esta misma semana y muy a su pesar deja al Moralo CP cuando aún no se ha cumplido ni el primer tercio de Liga. A partir de ahora comenzará una intensiva recuperación con ayuda fisioterapéutica para volver a jugar al fútbol sin marcarse ningún plazo. La lesión de tobillo, sin definir exactamente, ha acabado con su paciencia porque aunque entrena no lo puede hacer con absoluta normalidad.

En un gesto que le honra ha señalado que su condición física no es la idónea para ayudar como quisiera al equipo, por lo que necesita cambiar de aires para ponerse manos a la obra por la recuperación del tobillo derecho. Las diversas pruebas que se le han realizado en los últimos meses no han determinado con el daño que tiene y únicamente le han aconsejado que realice mucho trabajo de fisioterapia sobre el tobillo.

El jugador ya no tuvo la continuidad deseada la pasada temporada después de que padeciera esta lesión. Jugó un total de ocho partidos, tres como titular. En la jornada 24 precisamente fue la última vez que lo hizo, en Villanueva del Fresno el 6 de febrero de este año ante el Sporting Villanueva. A la semana siguiente tuvo la desgracia de sufrir un encontronazo involuntario con Alex en un entrenamiento y desde entonces su tobillo no es el mismo.

En la actual campaña, Rodri no ha llegado a debutar después del martirio de las molestias, y desde este humilde hueco le rendimos homenaje a este luchador y honesto futbolista que siempre estuvo a disposición del club con la ficha que le teníamos preparada. ¡Mucho ánimo y mucha suerte!

RODRI.
Rodrigo Rubio Nava, defensa diestro nacido el 16-9-1984. Mide 1,78m y pesa 67k. Procede del CF Navalmoral (2010), aunque ya perteneció al Moralo CP con anterioridad. Se formó en las categorías inferiores de la Escuela Morala de Fútbol. Debutó en el equipo en la campaña 2003/04 (4ª jornada) en el campo del Ciudad de Plasencia (1-1) el 20 de septiembre de 2003.

10ª JORNADA. Moralo, 1 ; Chinato, 1 .

Moralo: César Carrasco, Fran Mancha, Asiel, Jonathan, Arellano, Durán, Pino (Gallardo, 69'), Rubén Loarte, Adri (Piti, descanso), Rulo y Tortu (Romi, 65').

Chinato: Gabi, David Sánchez, Javi Núñez, Barbero (Senso, 86'), Óscar, Manu, Miguelín (Jorge, 77'), Farías, Ernesto, David Bartolomé (Oliva, 68') y Santi.

Árbitro: Durán Tato, de la delegación de Cáceres. Desastrosa actuación de este engreído colegiado que quiso ser el protagonista del partido y lo consiguió. Además de ser malo para los dos equipos, perjudicando considerablemente al Moralo, lo es para el propio arbitraje. Mal físicamente y con una actitud provocadora y caprichosa sacó de quicio principalmente al equipo de Navalmoral. Expulsó con tarjeta roja directa a los locales Fran Mancha (45+2') y Piti (81'), y a su compañero Arellano (87') por doble cartulina amarilla, así como al visitante David Sánchez (90+2'). Además amonestó con amarilla a los moralos Jonathan, Durán, Pino y Gallardo; y a los chinatos Manu, Farías y Oliva.

Goles: 1-0 Tortu (29'). 1-1 Manu, de penalti (45+3').

Incidencias: Algo más de 300 espectadores en las gradas del Municipal de Navalmoral en tarde-noche otoñal, con nubes y claros al principio para terminar, desde mediada la segunda mitad, con lluvia continua. Rectángulo de juego en regulares condiciones. Antes del inicio del encuentro fueron presentados dos equipos cadetes de la Escuela Morala.

Comentario: Es obligado comenzar una crónica como esta criticando la labor de un árbitro que campó a sus anchas quitando y regalando a diestro y siniestro. La peor parte se la llevó claramente el Moralo, que terminó con ocho jugadores sobre el campo por severas y exageradas expulsiones, fue castigado con un penalti inexistente y le fue ignorado otro, como mínimo, a su favor. El recital de silbato lo compartió también con el Chinato, pero ni mucho menos le hizo tanto daño. Durán Tato, pésimo y prepotente, influyó de forma apreciable en el marcador. La sensación para todos los moralos, y eso que cuesta caer en estos tópicos, fue de robo. De un atraco a traición de un personaje que en vez de repartir justicia y serenidad con los verdaderos protagonistas, abusó de autoridad para hacer y deshacer a su antojo.

Y eso independientemente que el cuadro de Navalmoral cuajara uno de sus peores partidos en lo que va de temporada. Quizás la necesidad de no fallar ante el colista para despegarse de la zona peligrosa de la clasificación le atenazó en exceso. Le costó entrar en juego y en la primera mitad se vio superado ligeramente por un Chinato bien plantado que en esos minutos causó buena impresión teniendo en cuenta su situación. Aún así, su pólvora completamente mojada. Fue lo que aprovechó el Moralo para adelantarse en el marcador.

El primero en avisar fue Óscar para el equipo de Malpartida de Plasencia. Sacó magistralmente una falta al borde del área y obligó a intervenir con acierto a César Carrasco para desviar por alto a córner. Poco después fue el ex moralo Miguelín quien tuvo la oportunidad de marcar delante del guardameta local, que rechazó por dos veces a la salida de un córner.

Poco a poco los verdes se fueron despertando y comenzaron a conectar por bandas. Tortu, tras ganar la espalda a su ex compañero Barbero, cayó dentro del área por una posible zancadilla que terminó en el limbo. Más tarde, Pino, con un fuerte y colocado chut desde fuera del área, encontró la fenomenal respuesta de Gabi para despejar a córner. En ese saque de esquina botado por Rulo, Fran Mancha cabeceó cruzado al palo y en el rechace Tortu, solo y desde cerca, envió al fondo de las mallas para el 1-0. En un solo minuto el Moralo no solamente había igualado las oportunidades de gol del Chinato, sino que se había beneficiado de otra más para ponerse en ventaja.

Todo transcurrió sin ningún sobresalto en ninguna de las porterías durante ese último cuarto de hora del primer periodo hasta que el árbitro empezó su concierto de grandes errores... por no llamarlo de grandes fantochadas ya con el tiempo cumplido. David Bartolomé se fue en velocidad por la izquierda para pisar área pero Fran Mancha, en el cruce, se interpuso justo en el momento de engatillar el disparo y despejar a córner. Ante el asombro de propios y extraños señaló el punto de penalti y no contento con ello expulsó al jugador moralo. Verlo para creerlo. El regalo lo aprovechó otro de los cuatro ex moralos que jugaron, Manu, que engañó a César Carrasco para establecer el 1-1 instantes antes del descanso.

Con toda la segunda mitad por delante, Luis Quintas, fiel a su estilo y convicción, arriesgó y dibujó sobre el campo una defensa de tres hombres. Con un jugador más sobre el césped, el Chinato controló más el balón pero no supo rebasar la adelantada zaga local para generar verdadero peligro. Por su parte, el Moralo con el paso de los minutos se fue haciendo más fuerte e incluso en algún momento llegó a creer en la victoria.

Durán, con un fuerte lanzamiento desde la frontal del área, forzó al portero contrario a rechazar con muchos apuros. Eso sí, de las pocas veces que los de David Salvo superaron la barrera defensiva hay que destacar dos casi seguidas. La primera cuando Arellano tuvo que despejar bajo palos un intento de vaselina de David Bartolomé, y la segunda cuando Miguelín disparó con mucha intención pero se encontró con la atenta respuesta de César Carrasco.

Después llegó un penalti de libro sobre Gallardo cuando ganó en velocidad la verticalidad para encarar al cancerbero Gabi y fue claramente, sin discusión, derribado. El penalti fue convertido en un córner ante las protestas de los diez jugadores moralos que calentaron aún más al trencilla. Pero es que para colmo, minutos después, Romi tuvo la oportunidad más clara para desnivelar el marcador definitivamente pero no pudo superar el mano a mano con el portero cuando se mascaba el 2-1.

Fue la última gran ocasión del encuentro de unos y otros. El descuento de siete minutos sólo hizo crecer la emoción y el enfado de la parroquia local ya que por entonces ya había sufrido dos nuevas expulsiones. A Piti por, al parecer, insultar al árbitro y a Arellano por una acción con un contrario que el colegiado premió a cada uno con una tarjeta amarilla.

Al Moralo le toca seguir remando todos hacia el mismo lado sin descanso y confiando en que el camino es el correcto a pesar de las tormentas que padecen de vez en cuando. Por el momento los jugadores continúan firmes en casa y la próxima jornada repetirán con un siempre atractivo y complicado derbi con la UP Plasencia. Los retos, para los valientes.

Villa, abandona la plantilla

El delantero Villa ha decidido dejar el Moralo por motivos personales. Asegura que no existe ningún problema con los compañeros de la plantilla ni con el cuerpo técnico, sólo que entiende que su participación en este inicio liguero está siendo escasa. Desmotivado por esa situación anunció su marcha al club en el primer entrenamiento de esta semana. Le intentaron convencer para que recapacitase pero ya tenía tomada la determinación de abandonar la disciplina del club de Navalmoral.

El jugador disputó las tres primeras jornadas de titular jugando los 90 minutos de cada uno de los partidos. En la segunda incluso, en casa frente al Ciudad de Plasencia (2-2), marcó un gol y dio la asistencia del otro. En la cuarta, ante la UD Badajoz (2-0) en el Municipal, salió del banquillo para volver a marcar uno de los tantos. Ya en la quinta tampoco jugó de inicio en Hernán Cortés y la media hora que lo hizo se convirtió en los últimos minutos que defendió la zamarra verde. Por una lesión, por asuntos laborales y por decisión técnica no volvió a ser convocado por el entrenador Luis Quintas en las cuatro siguientes jornadas hasta la fecha.

La campaña pasada, Villa disputó 37 jornadas (33 encuentros como titular, de los cuales 21 completos) y marcó 7 goles.

La ficha que le teníamos preparada en este blog, que en breve iba a ser publicada, era esta que a continuación detallamos en muestra del cariño que le tenemos. Mucha suerte y muchas gracias, futbolista.

VILLA.
Juan Carlos Villa Canales, delantero diestro nacido el 23-5-1983. Mide 1,80m y pesa 78k. Procede del Coria (2010). Cumple su segunda campaña en el equipo siendo el jugador que más partidos jugó del ejercicio pasado. Llegó a hacer la pretemporada con el Moralo CP en la temporada 2004/05 pero finalmente su fichaje no cuajó a las órdenes de David Salvo. Debutó en el club verde en la 1ª jornada de la campaña 2010/11 en Valdelacalzada (1-1) el 29-8-10.

9ª JORNADA. Sanvicenteño, 1 ; Moralo, 0 .

Sanvicenteño: Jose, Óscar, Carlos, Portu, Javito, Dávalos, Segundo, Melitón (Pike, 83'), Sota, Sito (Bejarano, descanso) y Diego (Ángel Rodríguez, 70').

Moralo: César Carrasco, Dani (Romi, 75'), Asiel, Jonathan, Arellano, Durán, Piti (Gallardo, 56'), Rubén Loarte (Adri, 67'), Pino, Rulo y Fran Mancha.

Árbitro: Villa Maestre, de la delegación de Cáceres. Muy buena actuación del debutante en la categoría. No tuvo problemas porque ambos equipos le ayudaron. Mostró cartulina amarilla a los locales Óscar, Portu y Bejarano, y al visitante Dani.

Gol: 1-0 Ángel Rodríguez (90+1').

Incidencias: Alrededor de un centenar de espectadores en la Ciudad Deportiva de San Vicente de Alcántara en mañana soleada y agradable. Rectángulo de juego en buenas condiciones. El Moralo jugó completamente de verde, cambiando su habitual pantalón blanco para no coincidir con el del Sanvicenteño. El partido fue retransmitido en directo por Canal Extremadura Televisión.

Comentario: Buen partido del Moralo y mal resultado, uno más fuera de casa, que le impide despegarse de la zona comprometida de la clasificación. El equipo de Navalmoral tuvo fases de absoluto control del partido por juego y ocasiones pero no supo plasmarla en el marcador y finalmente el cuadro local le castigó con un tanto en el descuento en una acción aislada. Quinta derrota consecutiva como visitante y un solo gol a favor es el pobrísimo bagaje que arrastran los verdes para no remontar el vuelo. En San Vicente merecieron romperlo pero su escasa pólvora se lo impidió.

La primera mitad estuvo igualada, intentando ambos conjuntos hacerse con el dominio de la pelota. Aún así, las llegadas locales fueron más en número y en nitidez, siendo la más clara cuando Dávalos estrelló el balón en un poste en inmejorable posición. La defensa del Moralo no fue capaz de despejar dentro de su área y Dávalos, con criterio se acomodó para disparar tan ajustado que se tropezó con el palo.

Sota fue una pesadilla para la zaga morala durante casi todo el choque y él fue quien fabricó el mayor peligro de su equipo aunque no encontró rematador hasta que se cumplió el tiempo reglamentario.

La única oportunidad clara para mover el marcador del Moralo en los primeros 45 minutos fue a balón parado, cuando Pino obligó a rechazar a córner al guardameta Jose con una buena intervención sobre la escuadra. Con la sensación de haber podido haber hecho más uno y otro equipo se llegó al intermedio.

En el segundo periodo el equipo de Navalmoral comenzó mucho más entero y con más posesión aún sobre el balón, lo que le permitió encerrar en su parcela al Sanvicenteño. Eso sí, sin apenas lances sobre el área, lo que aprovechó el cuadro local para avisar con un cabezazo en plancha de Bejarano que se perdió fuera con el cancerbero César Carrasco y sus zagueros vendidos.

A partir de ahí el Moralo reaccionó porque estaba viendo que a pesar de dominar con claridad las ocasiones no llegaban para llevarse el gato al agua. Con la inclusión de tres delanteros y su reestructuración en el esquema táctico, Romi, Gallardo y Adri provocaron muchos apuros a la retaguardia sanvicenteña. Romi, de fuerte chut, mandó al lateral de las redes; después Gallardo no superó por arriba al portero contrario en una acción muy clara; para que finalmente cuando se iba a cumplir el minuto 90 Romi encontrara los pies del cancerbero local después de una pared con Rulo en la frontal del área que le quedó delante en ventaja.

Tanto perdonó que al final lo pagó. Con el Sanvicenteño esperando el final del encuentro, Sota se inventó un fenomenal pase al hueco para que Ángel Rodríguez ganara la espalda a la defensa y batiera a César Carrasco sin remisión. Excesivo premio para su equipo y demasiado castigo para un Moralo que lo intentó pero se ahogó en su propia ineficacia.

Los tres partidos disputados en una semana han arrojado sólo tres puntos de nueve posibles al conjunto de Luis Quintas, justo en el momento que jugará ahora dos jornadas consecutivas en casa. El Municipal, precisamente, es su mejor aliado para sacar puntos y no está su situación como para no continuar siéndolo. Chinato y Plasencia esperan.

8ª JORNADA. Moralo, 1 ; San José, 0 .

Moralo: César Carrasco, Dani, Asiel, Jonathan, Arellano, Durán, Pino (Oliver, 75'), Rubén Loarte (Romi, 65'), Pintado (Piti, 57'), Fran Mancha y Rulo.

San José: Nico, Fermín, Ricardo (Ordóñez, 68'), José Antonio (Tirado, 81'), Mora, Sergio Paredes, Domingo (Luis Valladar, 73'), Nandi, Inchausti, Carmona y Mendo.

Árbitro: Pérez Ramos, de la delegación de Plasencia. Regular actuación. Mostró cartulina amarilla a los locales César Carrasco, Jonathan y al técnico Luis Quintas; y a los visitantes Luis Valladar y también a su entrenador José Manuel Cisneros 'Pana'.

Gol: 1-0 Fran Mancha (5').

Incidencias: Unos 300 espectadores en las gradas del Municipal de Navalmoral en mañana soleada y agradable del Día de la Hispanidad. Rectángulo de juego en regulares condiciones, algo peor que cuando comenzó la temporada. A pesar de no haber coincidencia de colores, el San José jugó con su segunda indumentaria, camisola blanca y calzón rojo con medias rojiblancas.

Comentario: Había que ganar como fuese y se ganó. El equipo de Luis Quintas sufrió para alcanzar tres puntos muy valiosos pero se hizo acreedor a ellos con buen juego, sobre todo en la primera mitad, que le valió también para defenderse con acierto ante el lógico empuje del conjunto de Almendralejo.

La victoria del Moralo ante un buen Atlético San José puede marcar un cambio en la trayectoria de los de Navalmoral en una temporada que han comenzado de forma irregular, sin haber sumado un solo punto en sus cuatro desplazamientos pero en la que se están haciendo fuertes en su feudo, donde siguen sin conocer la derrota con dos victorias y dos empates.

El cuadro verde se encontró con un tempranero gol a los cinco minutos del inicio y a partir de ahí todo le resultó más sencillo. Fran Mancha, el hombre más adelantado de los locales y actuando de improvisado delantero centro ante la ausencia de puntas naturales en el once inicial, aprovechó una indecisión entre los centrales nazarenos para adelantar a su equipo. Fue un gol de pícaro, de ratón de área, poco habitual en un centrocampista de su perfil.

El planteamiento inicial de Luis Quintas desconcertó al conjunto almendralejense. Con Villa lesionado, Tortu y Adri fuera de la convocatoria por decisión técnica y el único delantero nato, Gallardo, sentado en el banquillo -de hecho no llegó a jugar-, su táctica podría parecer conservadora, pero nada más lejos de la realidad. La primera mitad tuvo claro color verde, con un trabajo de Pino en la zona ancha repartiendo juego y recuperando balones. El Moralo trató mejor la pelota y suyas fueron las mejores, aunque escasas, ocasiones del primer acto. A los veinte minutos, Rubén Loarte pudo incrementar la renta pero su disparo seco y duro se encontró con los puños de Nico. No desagradó el San José a pesar de mostrarse romo en ataque en el primer periodo. Su buen trato del balón, siempre jugándolo con criterio, fue una muestra de por qué ha sido una de las revelaciones del arranque liguero.

En la segunda parte cambió la decoración. El equipo de Almendralejo despertó de su letargo y tomó la iniciativa. Su técnico ajustó las líneas y los nazarenos recuperaron el control del centro del campo ante un Moralo que acusó cierto cansancio. En el último cuarto del choque, las entradas de Ordóñez y Luis Valladar dieron un aire renovado al ataque visitante y fue en este tramo final cuando precisamente el San José disfrutó de sus mejores oportunidades para marcar.

La más clara la protagonizó Ordóñez con un cabezazo con marchamo de gol que encontró el espectacular vuelo de César Carrasco para desbaratar el peligro. Los últimos minutos fueron de agobio para el Moralo, que prácticamente renunció al ataque y se dedicó a conservar su exigua pero preciada renta. Ya en tiempo de descuento, Luis Valladar tuvo en sus botas el empate pero su disparo se fue alto para alivio de la parroquia local.

Con este triunfo, el Moralo toma oxígeno y logra despegarse un poco de los puestos peligrosos justo en el momento de encarar un tramo en teoría accesible y en el que va a enfrentarse a equipos que como él están situados también en la zona media-baja de la tabla. Tal vez del rendimiento del conjunto verde en esos compromisos dependan sus aspiraciones en esta campaña: mirar hacia arriba... o evitar el abismo.

(Crónica realizada por Luis Moral, querido amigo y compañero que nunca falla).

7ª JORNADA. Diter Zafra, 1 ; Moralo, 0 .

Zafra: Riobó, Víctor Paredes, Luis Martínez (Vicente, 80'), Ito, Marco Ortega, Martín Tártara, Víctor Moriano (Cano, descanso), Teo, Rafa, Chicote (Quintana, 86') y Cristo.

Moralo: César Carrasco, Dani, Asiel, Jonathan, Arellano (Oliver, 85'), Durán, Pino (Rubén Loarte, 70'), Piti, Fran Mancha, Rulo y Gallardo (Romi, 76').

Árbitro: Gómez-Landero Ossorio, de la delegación de Badajoz. Casero. Mostró tarjeta amarilla a los locales Víctor Moriano, Rafa y Cristo; y a los visitantes César Carrasco, Dani, Arellano, Durán y Oliver.

Gol: 1-0 Cristo (83').

Incidencias: Unos 400 espectadores en las gradas del Nuevo Estadio de Zafra en tarde-noche agradable. Campo en buenas condiciones. El Moralo jugó con pantalón verde para no coincidir con el blanco del Zafra.

Comentario: Cuarta salida y cuarta derrota para un Moralo que no espabila y queda con el paso de las semanas en una delicada posición en la tabla. En casa, con una victoria y dos empates, mantiene el pulso por sobrevivir en posiciones más desahogadas dentro de la igualdad pero fuera sólo ha conseguido un tanto para no arañar ni un solo punto.

Estadísticamente, que es pura curiosidad, el equipo de Navalmoral lleva más de medio año sin ganar fuera de casa ya que la última vez que lo hizo fue en Olivenza (2-3) la pasada campaña el 3 de abril, en la 32ª jornada. Desde entonces, dos empates y cinco derrotas consecutivas.

En Zafra, los verdes se presentaron con algunas bajas significativas aunque no por ello sirvió como excusa para nada. Los máximos goleadores, Villa y Tortu, y el mediocentro Pintado, que atraviesa un momento dulce, no pudieron ser convocados por distintos motivos y en cierta manera los de Luis Quintas lo notaron. Aguantaron bien, sin excesivos problemas durante más de medio partido, pero al final cedieron ante el empuje de un Diter Zafra que atesora jugadores de mucha calidad y probablemente pelee por una plaza de promoción. De hecho, para la expedición morala, ha sido el mejor equipo a quien se ha enfrentado por ahora.

Los primeros 45 minutos transcurrieron sin apenas sobresaltos. El Moralo se plantó bien sobre el rectángulo de juego y aunque el Zafra dominó la pelota apenas le generó peligro. La acción más peligrosa sobre las porterías la provocó Teo con un disparo que César Carrasco desvió a córner en una gran intervención. Por su parte, el cuadro de Navalmoral apenas dispuso de alguna llegada que pudiera inquietar el marco de Riobó.

En la segunda mitad la fábrica de juego de los segedanos comenzó a funcionar justo después de que Fran Mancha obligara al guardameta local a rechazar con muchos apuros un remate con la cabeza que se colaba en las redes. A partir de ahí, los preparados de Fael presionaron más y recuperaron más balones para intensificar su dominio. Fruto de ello llegaron las mejores oportunidades para abrir el marcador aunque el Moralo también tuvo algunas acciones que terminaron con tiros con cierto peligro.

Chicote con un golpe franco al borde del área exigió a César Carrasco estar atento para mandar el cuero a córner. Tras ese saque de esquina el conjunto azulón rozó los tres palos pero como en otras ocasiones posteriores los disparos se perdieron fuera sin que el cancerbero moralo tuviese que intervenir. Así hasta que en la recta final del encuentro Chicote con un pase magistral entre la defensa encontró a Cristo. El delantero encaró a César en su salida y le batió por bajo con maestría.

Con el 1-0 le entraron las prisas al Moralo e intentó generar peligro sobre el portal del Zafra, pero con poco tiempo por delante y con un rival crecido por la ventaja sólo se quedó en eso, en intento.

Toca volver a levantarse de un nuevo palo en el Municipal y ante otro adversario que ha arrancado bien y quiere instalarse en el tren de cabeza, el San José de Almendralejo. Lo bueno que tiene es que será el miércoles festivo y no habrá que esperar demasiado para procurar recuperar las buenas sensaciones.

6ª JORNADA. Moralo, 2 ; Mérida, 2 .

Moralo: César Carrasco, Dani, Asiel, Jonathan, Arellano, Durán, Fran Mancha, Pintado (Piti, 80'), Pino (Romi, 60'), Rulo (Gallardo, 72') y Tortu.

Mérida: Isaac, Jonhy, Francis, Luisma, Juan Vélez, Emilio Tienza (Santi Cezón, 87'), Carlitos (Juanan Sancho, 80'), Pedro Juan, Sergio Benito, Lauri (Álvaro, 76') y Patón.

Árbitro: Pérez Vidarte, de la delegación de Plasencia. Regular tirando a mala su actuación por sus cambios de criterio. Expulsó por doble amonestación al moralo Tortu (57') y al emeritense Francis (90+2'). Además mostró cartulina amarilla a los locales Dani y Fran Mancha, y a los visitantes Isaac y Patón.

Goles: 1-0 Tortu (32'). 1-1 Pedro Juan (33'). 1-2 Carlitos (77'). 2-2 Dani (90+2').

Incidencias: Alrededor de los 300 espectadores en las gradas del Municipal de Navalmoral en tarde soleada, con mínima pero animosa presencia visitante. Césped en buenas condiciones, aunque ya va perdiendo color. El Mérida jugó con su segunda indumentaria, camiseta roja y pantalón y medias negras. Antes del pitido inicial se guardó un minuto de silencio en recuerdo del fotógrafo Rafa Amigo, todo un clásico en la prensa gráfica morala, fallecido el pasado 24 de septiembre.

Comentario: Cierto que el Moralo logró rescatar un punto a última hora cuando parecía que lo tenía todo perdido, pero no es menos cierto que por lo que trabajó y persiguió durante los 90 minutos mereció incluso los tres.

Nunca, en ningún momento del partido, fue inferior a un Mérida que aprovechó casi al máximo sus contadas llegadas al área local y por el contrario durante buena parte de la segunda mitad, principalmente cuando se vio en inferioridad numérica, avasalló a un rival que daba por bueno la igualada. El punto al equipo de Navalmoral le sabe a poco pero en la situación en la que se encuentra cualquier punto sumado es un refuerzo más en su ánimo para continuar confiando en el trabajo y esfuerzo que está haciendo para aunar fuerzas, ganas e ilusión por salir del atolladero en el que se ha metido. Así, con la actitud mostrada en este encuentro, les resultará a los jugadores más asequible hacerlo.

El choque arrancó con dos equipos muy bien plantados sobre el césped con muy buenas intenciones para llegar al área rival con peligro. Eso sí, fue el Moralo quien dominó ligeramente más la pelota para hacerse el dueño de la situación gracias a su presión, lo que le permitió generar algún apuro a Isaac. Pintado, con un disparo cruzado por bajo, puso a prueba por primera vez al guardameta romano, que atajó el balón en dos tiempos. También Jonathan le comprometió con un lanzamiento de falta lateral que sacó con muchos problemas por bajo.

Con esos avisos el gol no se hizo esperar. Otro golpe franco botado en largo creó una pequeña melé tras tocar Fran Mancha que resolvió Tortu en semifallo y desde el suelo para colocar el 1-0 en el marcador. Lástima para los verdes que sólo un minuto después el Mérida sacara petróleo de su acercamiento más claro en todos los primeros 45 minutos. Un tiro desde fuera del área lo repelió César Carrasco con muchas dificultades y allí, desmarcado, Pedro Juan sólo tuvo que empujar para marcar el 1-1. Con esa igualada que podría catalogarse como de justa, por el afán de ambos conjuntos en hacerlo bien, se llegó al descanso.

En la reanudación, muy pronto Pintado, el futbolista más destacado de largo, aclaró que a su equipo lo que mejor le venía era la victoria. Robó fuera del área, encaró al portero algo escorado pero su cesión a Tortu la abortó precisamente Isaac en una buena intervención. La ambición del Moralo quedó totalmente evidenciada, así como el riesgo que asumió para que los emeritenses gozaran de una oportunidad sin buscarla. Jonathan y César Carrasco no se entendieron para anular una aproximación del adversario y tuvo que estar al quite perfecto Arellano para despejar a puerta vacía cerca de la línea de gol.

Al rato llegó la exagerada expulsión de Tortu por entender el colegiado que cometió falta en el juego aéreo con Emilio Tienza. Minutos antes fue castigado con amarilla por marcar un gol con la mano y en esta acción el árbitro premió el teatro del jugador romano. Eso espoleó a los moralos porque a partir de ahí abrió una larga fase en la que arrolló y sacó del campo física y tácticamente a los emeritenses. Con un jugador menos llegaron los mejores y más vistosos minutos para el conjunto de Luis Quintas, que enseñó las garras y se fue a por la victoria.

Rulo, con un incómodo remate cayéndose con un defensor delante de la portería, fue quien más cerca estuvo de volver a adelantar al Moralo pero su disparo se perdió fuera por poco.

Pero cosas del fútbol. En la única contra bien llevada por los de la capital autonómica, César Carrasco despejó como pudo un fuerte chut de Pedro Juan para que el siguiente disparo de Carlitos, desde la frontal del área por bajo, se alojara en las redes para establecer el sorprendente 1-2. A pesar de ello, aunque los verdes lógicamente acusaron el golpe en el primer momento, no se acobardaron y siguieron intentándolo sin descanso.

Así, en la falta que provocó la expulsión del capitán visitante por una acción sobre Fran Mancha, llegó el definitivo y más que merecido empate a dos goles. Dani no se prodiga en los saques de falta al borde del área, pero esta vez lo intentó en el descuento con un duro disparo por bajo que se incrustó en las mallas de Isaac para entusiasmo de los seguidores moralos. Final feliz, aunque fuera conformándose con menos de lo que mereció, para probablemente el mejor encuentro de la era Luis Quintas.