Moralo: César Carrasco, Dani, Asiel, Jonathan (Toribio, 59'), Arellano, Oliver, Pino, Fran Mancha, Rubén Loarte (Gallardo, 59'), Rulo y Tortu (Adri, 59').Villafranca: Abdón, Carlos Hernández (Ángel, 29'), Michel, Reyna (Sergio, 81'), Carlos Valenzuela, Javi Diestre, Mariñas, Mario Tomé, Manolo Sáenz, Servan (Juan Ramón, descanso) y Juan Carlos.
Árbitro: Conejero Sánchez, de la delegación de Plasencia. Regular. Amonestó con cartulina amarilla a los locales Rubén Loarte, Tortu y Oliver; y a los visitantes Abdón, Mariñas, Manolo Sáenz y Juan Carlos.
Goles: 0-1 Mariñas (17'). 1-1 Fran Mancha (78').
Incidencias: Unos 150 espectadores en las gradas del Municipal de Navalmoral en tarde-noche agradable. De las peores entradas de público esta temporada, probablemente por coincidir en horario con el equipo moralo de fútbol sala y con el partido televisado de la selección española de fútbol. Rectángulo de juego en irregulares condiciones. Durante la segunda mitad el técnico local Luis Quintas fue increpado por varios aficionados desde la grada y con uno de ellos se enfrentó sentado en el banquillo. El villafranqués Carlos Hernández fue sustituido porque se fracturó los huesos propios de la nariz tras recibir un golpe de Rubén Loarte en un acción aérea y fue trasladado al hospital Campo Arañuelo.
Comentario: El Moralo sigue en el alambre... y eso que nunca antes estuvo más cerca de caer a la zona de descenso. Un gol de Fran Mancha dentro del último cuarto de hora de partido lo evitó. Antes, durante más de sesenta minutos, el equipo de Navalmoral sí que intercambió su posición con el Villafranca para estar virtualmente en plaza de descenso. Ya en la jornada 13 parece un mal sueño del que nadie consigue despertar.
Y eso que era el día para al menos comenzar a espabilar y olvidarse de la pesadilla, pero no, del peligro no logra alejarse y las semanas continúan pasando. Enfrente tenían los verdes a los rivales propicios para ello, pero unos y otros evidenciaron sobre el maltrecho campo que los nervios y la obligación por no fallar les atenaza demasiado como para estar frescos de ideas. El choque fue malo en líneas generales y sólo lo exiguo del resultado dio emoción.
Y eso que el Moralo empezó bien. Salió con hambre de gol y presionó por todo el campo. Ya a los dos minutos Rubén Loarte desperdició la primera gran ocasión para mover el marcador. Un pase desde la derecha lo remató mal, con ventaja y cerca de la portería, para mandar el cuero a las nubes. Esa actitud y predisposición durante los primeros minutos presagió que sería el conjunto local quien se adelantaría en el marcador. Mientras tanto, el Villafranca se conformó con llegar al área contraria a balón parado.En dos córners consecutivos puso en aprietos a los moralos y en un tercero marcó su gol. El 0-1 se produjo con un cabezazo del siempre peligroso Mariñas, en el primer palo, que César Carrasco llegó a tocar pero no impedir que se alojara por la escuadra. El golpe fue tan duro e inesperado que los de Luis Quintas lo acusaron en los siguientes minutos. Aunque bien es cierto que después volvieron a tomar el mando del juego y dispusieron de un par de oportunidades para empatar antes de alcanzar el intermedio. La más clara la protagonizó Fran Mancha, que quizás se entretuvo demasiado dentro del área tras el pase de Rubén Loarte y disparó a un poste con un defensor encima. Después Rulo tuvo la suya en un contraataque por la izquierda que él mismo finalizó con un disparo cruzado, cuando pisó área, que se perdió alto por poco.
El segundo periodo lo quiso comenzar el Moralo de la misma forma que el primero, pero el tiempo se le fue echando encima sin crear verdaderos apuros a un Villafranca cómodo con sus pérdidas de tiempo y rechazando todos los balones que le llegaban a las inmediaciones de su área. El técnico verde hizo una triple sustitución que cambió poco para la última media hora a pesar de que Gallardo lo intentó todo como referencia ofensiva y que los riesgos que asumió el equipo en defensa eran patentes. En uno de esos lances, Mariñas se encontró con un balón suelto dentro del área tras una contra por la derecha de su ataque y empalmó a un palo. Verlo para creerlo.
De la posible sentencia se pasó al empate sólo cuatro minutos después. Un lanzamiento de falta desde el centro del campo de Oliver lo tocó cruzado y colocado Fran Mancha, algo escorado, para establecer el 1-1 que resultaría definitivo. De nada sirvieron después las urgencias de los moralos por intentar asaltar el muro amarillo, aunque otra vez Fran Mancha y después Arellano estuvieron muy cerca de rematar buenas ocasiones que los zagueros contrarios se encargaron de desbaratar cerca de su portería.
Sólo restan seis jornadas para dar carpetazo a la primera vuelta y el calendario para el Moralo no es nada halagüeño. Tres de sus próximos rivales están en zona de promoción de ascenso, dos más son serios aspirantes precisamente a esos puestos y el que falta, el del próximo sábado, está claramente al alza. ¿Será en este tramo cuando despierte?
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