3ª JORNADA. Coria, 3 ; Moralo, 0 .

Coria: David Jiménez, Alex, Rubén, Andrada, Liberal, Mahíllo, Santos (Lolo Santos, 62'), Juanqui, Pichi (Kiko, 83'), Álvaro (Rifle, 70') y Aranda.

Moralo: César Carrasco, Dani (Tortu, 66'), Asiel, Rico, Arellano, Jonathan, Pino, Fran Mancha (Pintado, 58'), Romi, Rubén Loarte (Rulo, 58') y Villa.

Árbitro: Gargantilla Fernández, de la delegación de Plasencia. Regular. Él en concreto estuvo correcto pero le equivocaron sus asistentes, principalmente Elizo Curto que concedió acciones en claro fuera de juego al equipo local, como en el segundo gol. Curiosamente al finalizar el choque reconoció sus errores y se disculpó ante la expedición morala (?). Una equivocación más, esta mucho más grave si cabe. Lamentable. Por el Coria fue amonestado con tarjeta amarilla Santos y por el Moralo vieron esa cartulina Dani y Arellano.

Goles: 1-0 Rubén (32'). 2-0 Asiel, en propia puerta (56'). 3-0 Lolo Santos (71').

Incidencias: Algo menos de 300 espectadores en el Municipal La Isla en tarde agradable. Campo en aceptables condiciones. El equipo de Navalmoral cambió su habitual pantalón blanco por uno verde para no coincidir con el del cuadro de Coria. El jugador visitante Romi tuvo que retirarse por lesión los últimos ocho minutos de juego con las sustituciones agotadas.

Comentario: Algo no carbura en el Moralo. De nueve puntos que ha disputado sólo ha logrado sumar uno. No parece haber asimilado el sistema que quiere su técnico, Luis Quintas, o él no es capaz de amoldarse a lo que tiene. No es inferior al rival pero sucumbe por acciones puntuales de las que no puede recuperarse aunque lo intenta. Eso fue lo que le volvió a ocurrir en terreno cauriense. Empezó bien cada uno de los dos periodos, con más y mejor control sobre el balón que el contrario, pero de pronto sufrió un manotazo en la cara y se la acabaron pintando. Las frías y puras estadísticas no dejaron ningún lugar a la duda que el Coria gozó de más llegadas al portal contrario que un Moralo que apenas lo hizo a pesar de dominar el juego en algunas fases del encuentro.

El conjunto de Navalmoral arrancó bien plantado sobre el césped, manejando el juego aunque sin profundidad. El cuadro local no tuvo prisa en hacerse notar y apenas un lance de Pichi, que obligó a César Carrasco a abandonar su portería, sirvió para poner nerviosa a la zaga verde sobrepasado el primer cuarto de hora. Fue como si a los moralos les entrase de repente inseguridad y falta de credibilidad en lo que estaban haciendo y querían. Se olvidaron de enlazar y de crear juego en medio campo y eso el Coria lo agradeció para dar un paso hacia delante.

Un disparo desde la frontal obligó a César a desviar a córner por bajo. Fue el preludio al primer tanto del partido ya que en el saque de esquina Rubén cabeceó cruzado al fondo de las redes. Mazazo a un Moralo que acabó de descomponerse con el marcador adverso, aunque en realidad no pasó verdaderos apuros y aguantó sin excesivos problemas el 1-0 hasta el descanso.

En la reanudación los de Luis Quintas volvieron a tomar el mando aunque esta vez fueron mucho más directos y verticales para asistir a Villa. Precisamente el delantero, en los primeros instantes, no llegó a cabecear por poco delante de la meta de David Jiménez un buen servicio desde la izquierda, que acabó en córner, y dio señal de que su equipo iba a ser mucho más inconformista. Pero llegó una acción en contra que le rompió la ilusión y las ganas por remontar.

Un escandaloso fuera de juego de Santos le plantó en inmejorable posición para encarar al guardameta visitante, aunque Asiel anduvo rápido y taponó el disparo desde el pico del área. Eso sí, con tan mala fortuna que lo desvió hacia su portería para despistar a César y convertirse en el 2-0. Para nada sirvieron las lógicas protestas al asistente ni que éste pidiera perdón después por su mayúsculo y decisivo disparate. Ese tanto hizo mucho daño a un Moralo que en los siguientes minutos acusó el golpe sin saber realmente lo que hacer para recuperar el ritmo del inicio.

Así, César rechazó una clara oportunidad de Pichi en el mano a mano, aunque poco después no pudo con el que le tentó Lolo Santos, también en dudosa posición aunque aquí ya la defensa morala estaba muy adelantada. El 3-0 fue una losa para el Moralo y le puso el tercer triunfo consecutivo en bandeja a un Coria que siguió en una nube. A partir de ahí los caurienses sí que jugaron a placer y forzaron un par de acciones sobre la portería verde, una de ellas de nuevo en posición claramente antirreglamentaria, que hubieran humillado aún más a los de Navalmoral.

Sólo Villa, con un fuerte disparo tras rodearse dentro del área, intimidó al cancerbero local con una parada en dos tiempos. Pobre bagaje como para haber alcanzado algún punto y terminar con la alarmante escasez. Este domingo, con las cámaras de la televisión autonómica en directo, el Moralo tendrá enfrente a otro necesitado UD Badajoz con el que deberá hacer más que quedarse en el intento.